Adiestramiento con clicker (Condicionamiento Instrumental)
El clicker se ha convertido en una importante herramienta para desarrollar una técnica de
adiestramiento con refuerzos primarios positivos (Thorndike), aplicable para diferentes fines. La base del adiestramiento con clicker está en el Condicionamiento
Instrumental (Skinner), que es un mecanismo de aprendizaje en el que la
conducta del animal produce la aparición de un refuerzo positivo o negativo.
Al adiestrarlo lo que buscamos es que el pájaro asocie el
sonido del clicker (reforzador positivo condicionado) que solo oye cuando
realiza una determinada acción que iremos moldeando con un reforzador primario positivo,
es decir, con algo que por sí
solo motive al animal, que le guste al punto de ser irresistible para
ella (comida, juego, caricias, etc.)
y no se encuentre en su dieta habitual si se trata de comida. De esta forma se utiliza el clicker para marcar el
momento justo en que aparece el comportamiento deseado. Después del sonido
siempre viene el premio, sin embargo a través del adiestramiento vamos
cambiando los programas de refuerzos, desde uno de intervalo fijo (se premia todas las veces que el perro realiza el
comportamiento deseado) a uno de intervalo variable (los refuerzos se
presentan en algunas ocasiones, de forma que nunca sabrá cuando será premiado
lo que lo mantiene atento y motivado).
Premiamos
cada paso que nos lleve al comportamiento deseado; esto se denomina moldeado
por aproximaciones sucesivas. Tampoco se utiliza la orden verbal, sino
hasta que ya sabe realizar el comportamiento que luego asociaremos a ella: el
momento de introducir una palabra o señal para que ejecute algún ejercicio, es
cuando vemos que realiza el comportamiento aprendido en cualquier momento
esperando que haga sonar el clicker; entonces al crear la señal verbal se
premia sólo cuando realice el comportamiento después de darle dicha señal. De
esta forma podemos ir agregando mayor complejidad a cada ejercicio, premiando
sólo las ejecuciones del detalle que queremos mejorar.
Tanto el
castigo como el premio deben aparecer en el momento en que se está realizando
el comportamiento, de otra forma el perro comprende por qué exactamente lo
premiaron o lo castigaron. El mensaje ya fue entregado, el premio sólo refuerza
aún más la orden.
Tenemos dos
grupos de consecuentes:
- Refuerzan: la palabra y los elogios; caricias, comidas, juguetes, juegos, etc.
- Castigan: la palabra y los aversivos.
En los casos
que hay apetencia a los refuerzos primarios (comida) podemos fortalecer las
respuestas sumando a la entrega del alimento la aplicación de caricias y
elogios.
[OJO: al principio algunos pájaros pueden asustarse del sonido del clicker.
Lo mejor es usar el click más flojo (suelen ser regulables).]
El método ABA (Análisis
del Comportamiento Aplicado) está basado en el análisis y modificación de la conducta.
El ABA estudia tres fases:
- Antecedente: un evento que ocurre antes de un comportamiento o una instrucción que se le da al ave.
- Comportamiento: la respuesta del ave, que puede ser desempeñada con éxito, inconformidad o ninguna respuesta.
- Consecuencia: la “reacción” del entrenador, que puede ser un refuerzo positivo, un refuerzo negativo o una alabanza débil o una reacción negativa (ej.: no).
Condicionamos de la siguiente manera: haciendo
click mientras el pájaro está
realizando el comportamiento deseado,
no una vez que lo ha completado. El instante en que se hace sonar el clicker es
crucial, pues finaliza el comportamiento. Dale el premio después; el momento en
que presentas el premio no es lo importante: el click es la clave.
Empieza con algunos ejercicios fáciles, pues al principio tardará mucho más
en aprender. Según vayan haciéndose con la idea y entiendan que el click
significa algo muy bueno (un premio, una caricia deseada), se entusiasmarán y
harán cada vez más cosas.
También se debe tener en cuenta que no todos los pájaros aprenden
igual de rápido: algunos en una semana ya manejarán la orden, otros tardarán
meses; por lo que hay que tener mucha paciencia y hacer las cosas con
tranquilidad.
Tal vez intente picarte mientras
le adiestras: si lo hace, NO le pegues, solo di un rotundo NO.
Las sesiones deben ser cortas, de unos 5-10 minutos para no exigir
demasiado y terminar siempre con algún “éxito”. Cuando se da el premio conviene
elogiarlo verbalmente también con voz suave y alegre. A los que estén
acostumbrados se les puede dar también alguna caricia.
Aplicación: Presentaremos como incentivo un trozo pequeño de algún alimento que
le guste, luego de contar mentalmente hasta 1 (contigüidad), acercaremos
el dedo de la mano que contiene el incentivo (comida) bajo su pecho y
presionaremos para que suba la patita. Según lo esté haciendo, haremos click,
le premiaremos verbalmente diciéndole que está “bien” (refuerzo secundario),
contaremos hasta 1 y le daremos acceso al alimento para reforzar la
conducta deseada. No utilizaremos la orden verbal hasta que la conducta se
presente fluida, motivo por el cual se repetirá este procedimiento entre 3 a 5
reiteraciones, nunca más de 10 minutos. Una vez la conducta sea fluida,
incorporaremos la orden verbal (Estímulo Discriminativo).
Diez consejos útiles:
- Haz click una sola vez en el momento oportuno: mientras está haciendo el comportamiento deseado, no después.
- Si deseas expresar tu entusiasmo por el comportamiento realizado, aumenta el número de premios, no el número de veces que haces sonar el clicker.
- Realiza sesiones de adiestramiento cortas. Tu pájaro aprenderá mucho más en tres sesiones de cinco minutos cada una, que en una hora de aburridas repeticiones. Además, respeta si no tiene ganas o si no tiene interés un día.
- Utiliza premios pequeños que le sean suculentos e irresistibles, no uses trozos enormes o poco motivantes.
- Erradica el mal comportamiento premiando con el clicker el comportamiento deseado.
- Haz click cuando realiza voluntariamente movimientos encaminados a la consecución del ejercicio que se le está enseñando (p.ej. se acerca cada vez más hacia tu mano).
- Haz click y premia los pequeños pasos hacia el objetivo.
- Incrementa el nivel de los ejercicios y tus objetivos tan pronto como obtengas la respuesta deseada, moldeando así el comportamiento.
- Cuando realice el comportamiento de forma espontánea para intentar que hagas sonar el clicker, es el momento de introducir el comando verbal o la señal de la mano.
- Pásatelo bien con tu ave, entrenándolo de forma agradable y motivadora. Así se establecerá un vínculo muy especial con vuestros plumíferos.
PD1: Toda la información aquí presente, no es más que una recopilación de diferentes foros, webs y demás etcétera.
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